viernes, diciembre 05, 2008

Siete vidas

Ni vivo ni difunto ni en el tajo,
dueño apenas de una pensión de heridas,
por deslizar tu bra senos abajo
¿qué ket no soñaría siete vidas?

Ni difunto ni vivo ni enredado
en las flechas de aquel tiempo que vino
a confundir pretérito y pasado,
a promediar el can con el felino.

Vivo y muerto (o puede que muerto y vivo)
−grosera superposición de estados−,
oliscando carroñas de museo,
maullando un soniquete primitivo,
sudando pedigrí por los tejados
de un cuántico refugio del deseo.

2 comentarios:

TALEGAS dijo...

Espectacular. Los sentimientos humanos son cuánticos pero de tanto quitar "bras" ten cuidado con el "wave collapse" donde nos sabemos, oeoeoeoe

TALEGAS (lo que queda...) dijo...

Y cinco años después me sigue encantando!!!!

redes