Discúlpeme que le advierta
que una ya tiene su edad,
ya convoca sin piedad
jornada de puertas abiertas
la ley de la gravedad.
Dispénseme que le diga
que caducó la compresa,
ya se sientan a la mesa
de negociación su barriga
y los helados de fresa.
Permítame que comente
que usted no es ya luminaria,
en asamblea extraordinaria
se ha valorado improcedente
renovar su maquinaria.
Luenga carne de museo
de un pasado subjuntivo,
firme firma el expeditivo
sindicato del deseo
su convenio colectivo.
Entiéndame bien, marquesa,
nada doy, nada le pido,
nada es legal, nada prohibido,
seguro que fue princesa
en otro tiempo perdido.
Comprenda, marquesa, el rito
que acompaña a la escalada,
la vida es sólo una cascada
que va y viene con el mito
de una eterna edad dorada.
3 comentarios:
Fíjese, marqués,
que yo siempre pensé que cuando uno ya tiene su edad, decorada entre sombras en el cabello, como un buen vino, deleita a cualquier paladar exigente. Porque cada gota roja que se disuelve entre saliva seduciendo a las papilas, deja un rastro púrpura indeleble en el olvido.
Claro, que esto podría ser sólo el mito de una eterna edad dorada ... Claro, que si así fuese, eso significaría que estaríamos rodeados del mito de una efímera juventud espumosa, porque querido marqués, bien sabemos lo que es el champán ...
Ni que decir cabe, marqués, que la forma de ver el paso del tiempo de cada uno puede diferir; pero estoy de acuerdo en olvidarnos de la espuma y disfrutar de cada gota, como muestra nuestra amiga mar-ia (que no sé si llamarla marquesa, porque creo que más cerca está de ser princesa, claro que conociéndola, mejor sería decir: "compañera").
Que el paso del tiempo no es más que ir encontrándonos y puliéndonos en lo que queremos ser, y dejar que las arrugas muestren la felicidad del tiempo pasado.
Bueno bueno no se si son mejores los poemas o los comentarios...marqueses y marquesas os voy a montar un castillo con mesa redonda y cabelleros para que deleiteis un buen vino, y con la pluma siempre dispuesta perfileis los cabellos de la edad pasada que para eso sois marqueses y marquesas, ahhh y mar-ia la princesa!!!
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