miércoles, mayo 21, 2008

Nosotros, por ejemplo

I

Imagina dos velas como falos
alumbrando tenues el aposento
a la espera furiosa del momento
de enseñarnos, tigresa, los regalos.

Imagina mil pétalos que alfombran
de rosas el lecho de la fortuna,
que has colgado tu ropa de la luna
y te besan los belfos que te nombran.

Imagina sobre tu piel desnuda
que una lengua tatúa con saliva
la bóveda de crucería de un templo.

Imagina a quien contigo suda
a golpes de pelvis agua furtiva,
imagínate que es... yo, por ejemplo.

II

Imagino una dulce melodía
acompasando el motor del amor,
una tarde estival en que el calor
empapa el sexo impuro de ambrosía.

Imagino en color el ritmo exacto
de cada latigazo de cadera,
que ondea con orgullo mi bandera
en el monte de Venus tras el acto.

Imagino ese trébol de dos labios,
un as de picas, un dos de pezones
que casi de pensarlo lo contemplo.

Imagino noches de desagravios
dentro de una dama rompecolchones,
imagino que es... tú, por ejemplo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ufff!!Creo que he imaginado demasiado...Necesito una ducha y bien fria!

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